Valores
El tener un enano en edad de merecer (azotes) te obliga a ingerir ingentes cantidades de televisión de canales tales como Playhouse, ClanTVE y similares. Entre episodio y episodio de La Casa de Mickey Mouse o de Zorori o de Bob y sus amigos, te meten la mayor publicidad posible de juguetes, para que los padres piquemos y compremos más cosas todavía. También echan anuncios de DVDs, sobre todo de series clásicas como Banner y Flappy, Vicky o La Abeja Maya. Para reforzar la urgente necesidad que tiene tu hijo de ver esas series, te explican "una serie que alienta el respeto por la naturaleza" o "unos dibujos llenos de ternura que explican el valor de la amistad" o aún "unas divertidas aventuras en las que la inteligencia prima sobre la fuerza bruta". La leche.
Y es que ya no se pueden ver unos dibujos animados en televisión por el mero hecho de que te diviertan. Todo tiene que servir para algo, y algo que sea adecuado para la infancia, añaden. Casi te entra sensación de culpabilidad si ves que tu hijo observa unos dibujos que no le aportan ningún valor positivo, ni despiertan su inteligencia o fomentan su espíritu de trabajo en equipo. Si sólo ve unos dibujos divertidos, fatal. Eres un mal padre desde ya. Antes, como éramos unos ignorantes, pasábamos las horas sin enriquecernos ni nada. Así hemos salido.
Etiquetas: dibujos animados, televisión
posted by Curro at 3:56 p. m.
5 Comments:
Empezaré por decir que yo, a diferencia de algunos congéneres humanos aún no he subido la tasa de natalidad de éste, con perdón,(y nunca mejor dicho) país que es España. Pero por desgracia con el afán y la mirada del aprovechamiento económico puesta sobre cualquier elemento del cuál se pueda sacar beneficio, los hombres de negro han puesto sus avariciosos ojos sobre el único reducto en el cuál el ser humnano se conserva puro: la infancia. Cuando yo era pequeño solía ver la televisión como muchos otros amigos míos, y demás niños en general. Uno veía aquellas series mas por diversión y pasar un rato agradable conociendo los argumentos, los personajes, más que emplear tiempo en discernir que valores tenía dicha seria, simplemente disfrutaba de todo aquello que veía. Parece que hoy por hoy, todo tiene un precio. La gente vende sus miserias por televisión, en programas tales como el diario de..(aquí métase un nombre al azar), realitys como el Gran Hermano, ahora el cuho o la caja o cualquier cosa cuadrada, en el cuál las miserias humanas pasan por la manipulación en directo de traumas, fobias, y demás problemas de índole psicológica a fin de despertar un morbo en la audiencia y de paso incrementar el share. Otro palabra que se ha convertido en uno de los elementos nocivos que han orientado de forma perversa e inequívoca, las directrices de la programación de cualquer canal. No buscando crear contenidos de calidad, sino cualquier formato original(últimamente todo elemento original siempre va acompañado de algún elemento morboso) o copiado con el cuál se pueda guerrear y destrozar al resto de canales televisívos. De todas formas los verdaderos valores residen en los padres, aquellos con los que los niños, de no surgir ninguna desgracia de por medio, son los que verdaderamente deben inculcar las enseñanzas básicas que deberan interiorizar para que llegados a la edad adulta, al menos cuando tengan que caerse y darse más de un leñazo, al menos dichas enseñanzas y valores les sirvan para amortiguar las caídas y rebajar un poco el dolor.
Curro, muchas gracias por pasarte a comentar en mi web. Ya te tengo fichado, así que de vez en cuando te devolveré la visita.
Un saludo!
Yôkoso, Pau :)
Ja ja ja, es verdad, yo también he visto esos anuncios. Precisamente esas series que publicitan eran bastante buenas, al margen de los valores que transmitieran o dejaran de transmitir, y por eso tuvieron éxito.
Me hace mucha gracia que digan que con "La abeja Maya" se aprende a conocer la naturaleza, siendo una serie llena de inexactitudes y de situaciones poco naturales (los insectos compadreando con las arañas,por ejemplo), pero lo que cuenta es que al margen de eso tenía buenos personajes y estaba bien hecha.
¡Saludos de un antiguo compi!
Bueno... no es que fuese (que sea) muy exacta cienctíficamente, pero al menos sí te hacía pensar que la abejita que te da el coñazo no es un insecto asesino, sino la buena de Maya. Un cierto cariño a la naturaleza sí que te inculca, pero de ahí a recomendarla por eso, hay un abismo. La Abeja Maya me gusta a mí, a mi hijo y a mi mujer pq es buena y ya. Pq el saltamontes Flip engancha a cualquier edad ;)
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